El invierno comienza a sentirse en el Distrito y con fuerza. Ello hace que a las ya deterioradas, destruidas calles de la localidad de Otamendi se agregue el factor climático que hace que sean intransitables, imposibles de circular. Nos hemos referido a su estado en muchas oportunidades. A la falta de maquinarias, a la inoperancia de los funcionarios, a la incapacidad, a la falta de escucha de los ciudadanos que hace que las prioridades del Gobierno marchen para un lado y las prioridades de la gente para otro lado. Por ello, hoy nuevamente la situación de las calles es alarmante. Autos encajados, barro por todos lados, huellones, suciedad, se vive en las peores condiciones. Por eso otra vez ponemos en evidencia esta situación, para que las autoridades reaccionen y pongan en la agenda diaria el cómo viven los vecinos porque no prestan los servicios como se debe y de acuerdo a los impuestos que se pagan. Otamendi hoy en un verdadero lodazal. Una pena.