La enfermera de oncología y su rol indispensable

Si los investigadores, médicos y epidemiólogos son decisivos para enfrentar el cáncer, hay una persona central que muchas veces se pasa por alto: el enfermero o la enfermera.

Particularmente, el especializado en tratamiento de pacientes oncológicos. Por eso queremos compartir una entrevista realizada a Mónica Fructuoso, enfermera de larga trayectoria, reconocida por su gran vocación de trabajo, en donde nos cuenta la enorme tarea que realizan las enfermeras en el área de oncología dentro del Hospital Municipal Marino Cassano.

-¿Cuántos años llevas trabajando como enfermera?
Hace 37 años que soy enfermera. Ser enfermera es una noble profesión, uno lo lleva en el alma. El poder ayudar a aliviar el dolor del paciente tanto físicamente como psicológicamente, y no solamente al paciente sino también dar alivio y tranquilidad a los familiares es lo fundamental y enriquecedor de este trabajo .

-¿Qué es para vos ser enfermera?
Soy la tercera generación, en mi familia, de esta hermosa profesión. Carolina quiero que sepas que esta profesión yo la llevo en la sangre ya que mi abuela y mi madre fueron enfermeras y se jubilaron como enfermeras, en nuestro Hospital querido Marino Cassano, te darás cuenta que he mamado la profesión desde la cuna, es una hermosa profesión.

-¿Cómo está funcionando el servicio de oncología del hospital?
En el año 2005 se decidió instalar en el hospital el consultorio de quimioterapia. El servicio de quimioterapia junto con el servicio de oncología se está trabajando a full, muchos pacientes mutualizados y no mutualizados se acercan al servicio para hacer atendidos.

El consultorio de quimio es un poco pequeño para atender al paciente oncológico ya que el servicio quiere complacer con la compañía de un familiar a su lado durante el tratamiento, confiamos que en el futuro pueda ser ampliado, ya que da al paciente mucha seguridad el estar acompañado por un ser querido. Este es nuestro propósito necesitamos estar más cómodos ya que es indispensable. En el consultorio contamos con tres sillones reeinclinables, el paciente desayuna y se le da un refrigerio preparado por nosotras en el servicio.

-¿Por cuantos profesionales está integrado?
El servicio de oncología está compuesto por la doctora Casati, gran oncóloga, y tres enfermeras en quimioterapia. Convengamos que al inicio del consultorio estuve sola durante nueve años atendiendo los pacientes, luego logramos traer a la doctora Casati quien nos acompaña hasta ahora y desde hace 3 años me acompaña la enfermera Mariela Cejas, también desde hace tres meses se integró al servicio la señora Beatriz Zapata.

-¿Cuántos pacientes atienden aproximadamente?
Se atienden alrededor de cuatro pacientes por día, más los ambulatorios, que son atendidos en su domicilio, porqué el servicio sigue en pasiva trabajando fuera del hospital.

-¿Cómo es el día a día laboral?
Un día laboral en quimio se sabe cuándo comienza pero no cuándo se termina. Se sigue todo el día de guardia, como te comente. Los días miércoles atiende el consultorio de oncología donde la Dra. Casati, controla los pacientes e indica los tratamientos a seguir.

-¿Qué es lo más gratificante de tu trabajo?
Lo más gratificante es ver que los pacientes se sienten tranquilos, seguros y cómodos. Se crea un ambiente muy familiar. Siempre hacemos, antes de que el paciente comience el tratamiento, una consulta previa para conocernos e indicarles los cuidados que deben tener durante y después del tratamiento.

-¿Y lo más difícil?
Lo difícil es encontrar una rápida entrega de los citostáticos, tanto por mutuales o por Zona Sanitaria. Sabemos que son medicamentos sumamente costosos y se dificulta la entrega inmediata y los pacientes están ansiosos por comenzar el tratamiento o seguir el mismo. También contener al paciente, sobre todo a la mujer, en que se le informa sobre la caída de cabello.

Por otro lado entre lo difícil podemos encontrar lo gratificante y es que podemos informarles que logramos contar con prótesis capilar (pelucas) y podemos contar con los préstamos de las mismas de “QUIMIO CON ESTILO”, que trabaja de esta manera, conjuntamente con el servicio de quimio. Para ello se hace recolección de pequeños mechones donados por la gente las cuales se envían a Mar del Plata para realizar las mismas. Aprovecho para invitar a quienes deseen colaborar con su pequeño mechón de cabello, se acerquen al Servicio de Quimioterapia del Hospital, también se reciben en los CAPS municipales y Supermercado Noa quienes recientemente se integraron.

-¿Recordás alguna anécdota que refleje esa suerte de intimidad que se da entre una enfermera y paciente?
Sí, tengo muchas anécdotas, pero quedan entre el paciente y la enfermera. Es secreto profesional

-¿El enfermero de oncología también tiene una tarea en la prevención y el control del tratamiento?
Sí, desde el comienzo del tratamiento hasta el final del mismo, se sigue en un continuo contacto telefónicamente o domiciliario. Nuestro teléfono queda abierto las 24:00hs del día por cualquier duda o síntomas del paciente.

-Sobrellevar un desenlace fatal es duro, pero cuando hay que sobrellevar muchos, sobrevienen cuadros estrés ¿Hacen algún tratamiento psicológico para poder manejar estas situaciones repetidamente?
Sí Caro, es muy duro perder un paciente. Pero tenemos que sobreponernos, porque hay muchos más pacientes que quedan y necesitan de nuestra ayuda, la cual ellos nos dan más fuerza para seguir. Los mismos familiares de los pacientes perdidos siguen en contacto con nosotras y llegan al servicio, el cual compartimos un café y se habla de la persona pérdida con mucho respeto y amor, siendo que ha sido una pérdida muy grande, quedando el familiar más tranquilo y si nos necesitan que concurran las veces que deseen.

En varias oportunidades a los familiares no les queda un triste recuerdo del servicio, porque manifiestan su tranquilidad en que su familiar fue tratado con mucho amor, calidez y respeto, como se lo merece. En cuanto al profesional operador, en mi caso cuento con un “pilar inmenso y de hierro”, que es la de mi familia. Sin ellos no hubiese podido seguir con el servicio. También dos grandes pilares, son mis dos grandes compañeras, que nos psicoanalizamos y nos apoyamos entre nosotras.

-Mónica ¿crees que hay poco reconocimiento hacia los enfermeros/as?
Si siempre lo hubo y lo habrá. Se está luchando para que enfermería sea reconocido como profesionales porque somos profesionales.

-¿Algo que quieras compartir con nosotros?
Quiero agradecer a Semanario El Argentino, a vos Caro por haber hecho esta nota, ya que muchas personas no saben que contamos con el servicio de quimioterapia en Miramar. También quiero dar un agradecimiento muy grande a la Cooperadora del Hospital que gracias a ellos se pudo montar el servicio, desde la campana de flujo laminal, hasta su última silla. En ese momento en la presidencia de la Cooperadora estaba la señora Noemí Radizani y quienes están actualmente que continúan colaborando con el consultorio.

También quiero agradecer al Doctor Javier Pereyro y también a quien en ese momento era intendente de Gral. Alvarado, Tomás Hogan, quien creyó en que nuestro distrito iba a tener su consultorio de quimioterapia. El servicio está creciendo en cuanto a nuevos tratamientos, que se realizan bajo la conducción de la Doctora Casati ,quien realiza congresos y siempre nos está capacitando con lo último en tratamientos como la utilización de bombas portátiles de 48 hs., que es mucha más comodidad para el tratamiento del paciente.

Por último quiero mencionar que estamos en el mes del cáncer de mama. Y que no nos olvidemos hombres y mujeres, de hacer su revisación mamaria, el cáncer tomado a tiempo es curable.