
La decisión de la Gobernadora de la Provincia de Buenos Aires María Eugenia Vidal de no desdoblar las elecciones en el principal Estado Argentino ha generado frustración y desazón en las huestes del Frente Renovador. Es que la propuesta ha sido desarticulada y eso tiene consecuencias en el Distrito de Gral. Alvarado. Luego de las dos derrotas consecutivas sufridas por Germán Di Cesare y su lista de concejales en el año 2017, a lo que se le suma el agotamiento de la gestión y la falta de obras han ido debilitando la propuesta del Frente político que integra en favor de otras fuerzas políticas. Los votos que obtuvo drenan hacia dos lados, hacia el Frente para la Victoria que encabeza Paulo Tilaro que estaría igualando fuerzas en alguna localidad con cualquier candidato del oficialismo y muchos también hacia Cambiemos que según quien sea el candidato obtendrá mas o menos sufragios de esa vertiente.
Pero la alternativa planteada ya no tiene sustento y ha sido desestimada. Por eso Massa y alguno de sus dirigentes califican la decisión como una imposición de Macri para no quedar aislado y debilitado en la elección presidencial. Ahora la elección será conjunta y la polarización otra vez se ve muy marcada. Cambiemos y el Frente para la Victoria o Unidad Ciudadana compiten en los primeros lugares. Mas lejos Massa y Alternativa Federal y con ello los pocos Intendentes que le quedan que no logran tracción de votos de arriba hacia abajo. Y desde abajo por lo que venimos señalando y con el antecedente de las derrotas ya sufridas la situación se torna difícil y complicada. La preocupación del oficialismo es cada vez mayor y analiza una retirada no traumática y sin contratiempos. Vidal definió por una elección única y esto produce consecuencias. En Gral. Alvarado también.