Desastre generalizado en calles

Así puede calificarse el estado de las calles de la mayoría de los barrios de la ciudad. Las últimas lluvias evidenciaron nuevamente la falta de trabajos sostenidos y con criterio profesional y pusieron de manifiesto el hartazgo de la población que se ve afectado por los malos servicios.
Lo hemos tocado al tema en infinidad de circunstancias, pero la realidad impone el tratamiento nuevamente de esta problemática. Calles intransitables. La gente no puede entrar con sus vehículos. Autos que se deterioran y rompen. Como consecuencia de los pozos llenos de agua. Pantanos por doquier.
Y recién comienza el invierno, lo que hace prever que la población estará sometida a este desastre generalizado de las calles por varios meses. Es tiempo de que las autoridades realicen la inversión correcta en la atención de una de sus obligaciones esenciales que es el mantenimiento de calles y caminos y no derive recursos a cuestiones superfluas, a venderse periodísticamente cuando la realidad marca otra cosa. Esta es una cuestión prioritaria. Esperemos que alguna vez lo entiendan. Porque la población ya no aguanta más la dejadez y la desidia que le hace sufrir las consecuencias a los que sostienen la burocracia estatal.