Las consecuencias de la interrupción de clases presenciales

Incremento de las desigualdades, pérdida de aprendizajes, deterioro de la salud física y emocional de los estudiantes y menores posibilidades futuras de empleo. Estas son algunas de las consecuencias de la falta de presencialidad en las clases, según enumera un informe del Observatorio Argentinos por la Educación en base a investigaciones realizadas en distintas partes del mundo en el contexto de la pandemia por la COVID-19.

Según el documento, titulado “¿Cuáles son las consecuencias de la interrupción de clases presenciales?”, los efectos son mayores en los niveles socioeconómicos más bajos. El informe sostiene que en Bélgica la desigualdad en el rendimiento académico aumentó hasta 20% en los estudiantes.

En cuanto a la pérdida de aprendizajes, un estudio realizado en los Estados Unidos afirma que los alumnos de primaria podrían perder cerca del 70% del aprendizaje de 2020 en lectura y hasta el 50% en matemática. Mientras que los niños de jardín podrían experimentar una pérdida de alfabetización de hasta 67%.

Respecto de las consecuencias en la salud, según lo analizado en Reino Unido, el 83% de los niños con necesidades de salud mental empeoró sus condiciones producto de la suspensión de las clases presenciales. Además, un estudio en Italia mostró que durante el cierre escolar aumentó el consumo de bebidas azucaradas y comida con alto contenido calórico, a la vez que disminuyó la actividad física semanal y aumentó el tiempo frente a una pantalla.

Se analizó que los efectos pedagógicos negativos no sólo se acentúan en los países de menores recursos, sino que también afectan especialmente a las mujeres. En estos países, las mujeres pertenecientes al grupo de más altos recursos tienen una deserción escolar del 18%, mientras que para los hombres la cifra es del 13,5%, lo que aumenta la desigualdad de género.

Los estudios también demostraron que asistir a la escuela de manera virtual reduce un 10% la probabilidad de graduarse de la secundaria, un factor asociado a tener mayores posibilidades de conseguir un empleo. El cierre escolar presencial está asociado a peores resultados en pruebas estandarizadas –como las PISA–, lo cual suele utilizarse como parámetro de menores oportunidades de empleo.

El informe del Observatorio concluye que las investigaciones muestran que los riesgos de contagio con la presencialidad escolar son muy bajos en comparación con las pérdidas que genera la suspensión de clases presenciales en términos de aprendizajes, oportunidades de empleo futuro y justicia social.

fuente: https://chequeado.com/hilando-fino/cuales-son-las-consecuencias-de-la-interrupcion-de-clases-presenciales/ y https://www.unicef.org/argentina/articulos/posici%C3%B3n-frente-al-regreso-de-clases-presenciales-en-2021