
Así lo pudimos constatar luego de las lluvias del fin de semana pasado. Barro, huellones, lagunas en muchas calles de la ciudad por la falta de mantenimiento y arreglo de las calles en tiempo oportuno y con la maquinaria adecuada.
Así lo pudieron verificar también los concejales municipales de la oposición que recogiendo el reclamo de los vecinos estuvieron en el lugar y observaron el desastre que significa la falta de elementos y atención de las arterias de la ciudad.
Es que sin equipamiento, con un solo camión, un tractor y un carrito es imposible cumplir las funciones. Se levanta la basura como se puede y no se hace nada más. Solo cuando una maquina esta disponible de Miramar se presta algún servicio. Y entonces, a la primera lluvia todo es un lodazal Otamendi, sigue abandonada por sus autoridades. Lamentable.